Quisiera, siento que debo. Vomitarte. Sacarte de mí como se saca la comida en mal estado.
Siento que el dolor me llena tanto que no cabe más que dolor. Para él siempre hay sitio. Pero Morfeo siempre llega a salvarme tras litros de dolor y, al día siguiente, tras su encanto, me doy cuenta. No era la presión lo que tenía dentro, lo que me hería. Era el vacío, un vacío completo, sincero. Es el vacío lo que me mata por dentro, el motivo por el que te anhelo es la nada, te amo por culpa de nada. Y de nuevo pienso. Si me hubieras querido yo no te habría amado, ese es mi sino. Ahora ya no importa, te vomité, y te fuiste con mi pasado al tirar de la cadena.
3 comentarios:
Espero que no vuelva...
Aunque digas no querer consuelos, me queda pendiente tu frase "Debería ser egoísta, pero ni pa eso valgo", y te revelo, si es que quieres oirlo, que el concepto de egoista no me cuadra y puedes cambiarlo x el de amor propio y eso es un punto que no tiene absolutamente nada de egoista. Las cosas hazlas por ti para demostrarte lo mucho vales y dudo que no tengas valor para hacerlas ya que ni siquiera te conozco pero por lo q puedo intuir en tus post no me das esa impresión en absoluto.
Siempre queremos lo que no podemos tener. Como dice la mitica cancion: "siempre me voy a enamorar de quien de mi no se enamora...." :P
Y bromas a un lado, ¿acaso es más verdadero algún tipo de amor que el platónicol, el imposible, el destructor? Para mi este tipo es el unico que se ha ganado el derecho de llamarse Amor
Publicar un comentario