martes, agosto 23, 2005

Sólo me apetece vomitar en tu cara.

lunes, agosto 22, 2005

Quiero dormir

Ya no puedo dormir más, no puedo. Lo he intentado, cerrar los ojos y quedarme ahí para siempre, pero no puedo...
Lo siento, lo siento, lo siento eternamente. Yo no quería, no lo sabía, pero es mi culpa y sólo espero poder hacer algo para enmendarlo, y que no me odies...
Vosotros, cabrones, no puedo creer que os considerase mis amigos y hagáis esto, me impresiona el nivel tan sumamente bajo al que llegáis. Es la primera vez que me planteo el pegar a alguien una paliza y más siendo alguien con quien he compartido tantas risas. Pero sois escoria y nadie imagina las ganas que tengo de patearos la cara hasta que no se os reconozca.
Es increíble el nivel tan bajo al que llega el ser humano, por eso yo quería dormir y soñarme distinta. Soñarme pájaro para volar lejos de aquí, soñarme pez y nadar profundo para no volver a veros nunca, soñarme piedra y no sentir dolor ni miedo, soñarme arma y atravesaros las entrañas.

viernes, agosto 19, 2005

Mio!!!

Lo tengo! Es mío y sólo mío! Lo intenté una vez y vi cómo se llevaban el último en mi cara (en mi naricita¬¬'), pero ahora es mío, ahora fui yo la que se llevó el último de otra tienda y esque me encanta!!!
Os presento a Roy, the toxic boy, el chico o el niño tóxico para los amigos, es un personaje de los cuentos de Tim Burton del libro La Melancólica muerte del Chico Ostra y otras historias que podeis leer en inglés en el enlace y que si lo quereis en castellano (incluye también las historias en inglés) y con todos sus dibujitos lo podeis conseguir, es de la editorial Anagrama y, por supuesto, yo lo tengo jeje.


Chico Tóxico

Quienes de verdad lo amamos
lo llamamos siempre Max.
Chico Tóxico, en cambio,
lo apodaban los demás.

Inhalaba Chico Tóxico
humo, asbestos y amoniaco.
Para él era oxígeno
todo lo cancerígeno.

Su juguete favorito
era un bote de aerosol
que disparaba solito
todo el día, de sol a sol.

Se levantaba aún de noche
a esperar en la cochera
a que el motor se encendiera
y, tras carraspear, el coche
lo maquillara -muy mono-
con bióxido de carbono.

Una sóla vez lloró,
más no por tristeza ni odio;
es que en los ojos le entró
algún cloruro de sodio.

Por darle algo de aire cálido
lo sacaron al jardín.
Se puso al instante pálido
y tieso como espadín.

Tieso y duro, sí, muy duro.
Pues ¿quién podría colegir
que uno pudiera morir
al respirar aire puro?

Voló su alma en pos del trono
celestial del Señor. Pero
abriendo un gran agujero
allá en la capa de ozono.


Roy, the Toxic Boy

To those who knew him
-his friends-
we called him Roy.
To others he was known
as that horrible Toxic Boy.

He loved ammonia and asbestos,
and lots of cigarette smoke.
What he breathed in for air
would make other people choke!

His very favorite toy
was a can of aerosol spray;
he'd sit quietly and shake it,
and spray it all the day.

He'd stand inside the garage
in the early-morning frost,
waiting for the car to start
and fill him with exhaust.

The one and only time
I ever saw Toxic Boy cry
was when some sodium chloride
got into his eye.

One day for fresh air
they put him in the garden.
His face went deathly pale
and his body began to harden.

The final gasp of his short life
was sickly with despair.
Whoever thought that you could die
from breathing outdoor air?

As Roy's soul left his body
we all said a silent prayer.
It drifted up to heaven
and left a hole in the ozone layer.

domingo, agosto 14, 2005

Enigma

Bluesman, va por tí:

Imaginad un pasillo de normal y corriente de un edificio. Por ese pasillo camina un hombre vestido con traje y corbata que porta un maletín, en el cual lleva unos importantes papeles para su trabajo. No hay nadie más en el pasillo.
De repente se va la luz. Al volver a encenderse, los papeles se encuentran rotos en el suelo.
¿Alguien sabe por qué los ha roto?

sábado, agosto 13, 2005

Por qué no se debe cocinar descalza y en bikini

¿Por qué creen que no suelo hacer nada que haya que freir con aceite? Pues porque es como cuando me dan un cutter, cuchillo, sierra, o cualquier otro tipo de arma blanca para hacer un trabajo. Como cuando casi me amputo el dedo haciendo una escultura en poliespán. Que soy así de borrica...
Pero esque no escarmiento, porque depués de todo yo cogí y me puse a hacer unas deliciosas hamburguesas caseras (me salen increíbles a pesar de todo) para mi hermano y para mí. Pero, joder, hacía calor, y como no encontré un delantal para ponerme en modo porno-chacha (sólo el delantal) pues me puse a hacer la cena en bikini y descalza (tal como dice en el título que NO debe hacerse...). En principio no hubo problema alguno cortando la lechuga, el tomate y la cebolla, hasta el queso ya estaba cortado en lonchas (ains, adoro la tecnología a veces) y ya sólo quedaba una complicación (el pan y el ketchup no me resultan amenazadores), la propia hamburguesa. Carne congelada porque la carne sangrando me da asco (sí, ya lo sé, menuda vampira... ¬¬'), sartén y, lo más arriesgado, aceite caliente... Parece fácil, sólo hay que poner la carne en la sartén con cuidado para que no salte el aceite. Primer paso conseguido. Segundo paso, ahora hay que darle la vuelta. Se coje la "espumaera", se pasa por debajo de la carne y se le da la vuelta con un suave giro de muñeca. Problema: el giro de muñeca es importante, si no lo haces bien descubrirás por qué NO se debe cocinar en bikini y descalza. El aceite salpica, y quema, puedo jurar que quema, y mi pie recien traído de urgencias también.
Lo peor es que la historia no acaba ahí... No he ido a urgencias por quemarme el pie con aceite (las salpicaduras de la mano y la pierna eran pequeñas), he ido a urgencias porque me puse una maravillosa tirita de patitos para que no me rozase nada la ampolla y al ir a quitármela la ampolla había desaparecido, más que nada porque se quedó en la tirita y se me quedó en carne viva con la consecuente infección que es la que me ha llevado a urgencias.

La maravillosa tirita de patitos.












El resultado al quitar la tirita (foto anterior a la infección)










Por favor, hacedme caso, usad delantal, y no se os ocurra acercaros al aceite caliente descalzos.

viernes, agosto 12, 2005

Carta desde mi celda XIV

R. me encuentro extraña, no sé si mal o bien, extraña. Es como si no fuera yo o como si este no fuera mi sitio, no me refiero al sanatorio, me refiero a todo, al mundo, a mi propio cuerpo.
Tal vez esté loca, por lo visto así es, tal vez sea por eso que siento esto pero... ¿tú nunca sentiste cuando estabas aquí, pisando tierra, que tu corazón latía a un ritmo que no compartía con tu alma? No sé si alguien podría entenderlo, sé que Cris está preocupada, me nota distante con ella, es cierto que soy más fría últimamente, que no dormimos abrazadas y yo le doy la espalda desde mi cama y me hago la dormida mientras pienso. Sé que se pregunta lo que hago cuando me escondo para escribirte, pero no se atreve a preguntármelo a mí. Nunca hablo de ti, el día que te volví a ver, en la ventana, ella te miró de una forma extraña, creo que sentía celos tal vez, nunca intentó acercarse a tí. Creo que ella espera algo más de mí y me da miedo, la quiero, pero es sólo un cariño especial, sólo son besos y abrazos que provienen de ese cariño, pero ella parece quererme como una pareja y yo... no puedo corresponder, yo te sigo queriendo. Necesito tu mirada, tus estrellas. Necesito descifrar el significado de 101...

lunes, agosto 08, 2005

Carta desde mi celda XIII

Saludos desde mi mundo R. me gustaría saber cómo estás ahí arriba, porque sé que si hay un "arriba" ese es ahora tu lugar. Aquí abajo las cosas cambian poco, o mucho, según la mirada. En general todo sigue igual que hace unos días, pero son los detalles los que hacen de la vida algo interesante, y hay muchos detalles nuevos.
Anoche no me apetecía dormir, me duele soñarte cada noche y más que soñarte, despertar sin tu presencia, sin tu mirada. Me pasé la noche mirando las estrellas, contándolas, esperando que al final me resultara un número bonito que significara algo, esperando que me hablaras a través de ellas. Resultó un número capicúa y sé que significa algo, 101 tiene que significar algo y averiguaré qué es. He pensado que tal vez signifique este cambio de papeles. Tú eras mi consuelo, ahora lo soy yo de Cris, y a su vez ella es el mío. Tal vez...
Toda la noche mirando a la Luna, contando estrellas, soñándote de nuevo, esta vez despierta, hasta el amanecer...

jueves, agosto 04, 2005

Carta desde mi celda XII

Todo ha vuelto a la normalidad. Ya no me miran tanto con esa compasión dolorosa y he vuelto a mis actividades normales.
M. me aconsejó "utilizar" a Cris como confidente y a ella le aconsejó hacerlo conmigo de modo que hoy decidimos ir a un rincón más apartado del jardín para hablarnos de nosotras mismas, de nuestro pasado y nuestros por qués.
Creo que Cris se asustó un poco al principio cuando le expliqué que había sido ingresada por decisión de un juez tras el asesinato, pero pronto comprendió que no era violenta, nunca me había visto hacer daño a nadie y siempre la traté con amor.
Yo también me sorprendí con su historia. Había estado a punto de casarse con un hombre bastante mayor que ella (unos 10 años mayor), excéntrico y fantasioso. Él se pasaba el día contando historias de verdades a medias en las que era imposible discernir fantasía y realidad. A Cris le encantaban esas historias, le encantaba reir con ellas y dormirse entre sus brazos hasta que él también comenzó a creerse sus mentiras y a hablar demasiado. Empezaba a hacer daño a los demás haciéndoles pensar que estaba gravemente enfermo y cosas similares. Un par de meses antes de la boda discutieron. Cris al fin explotó y le gritó todo el daño que estaba haciéndo a su alrededor, pero él mintió de nuevo estúpidamente y Cris hizo un primer intento de suicidio por el que estuvo ingresada en el hospital donde le impusieron ayuda psicológica. Cuando salió del hospital quiso ir a hablar con él, pero había desaparecido como por arte de magia y nadie fue capaz de confesar su paradero. Cris tuvo numerosas depresiones e intentos de suicidio que desembocaron en su ingreso. Tenemos más en común de lo que pensaba. Las dos perdimos a nuestro amor, las dos estamos aquí... Sólo faltas tú, si ella te conociera, sería tan distinto...

martes, agosto 02, 2005

Carta desde mi celda XI

Te echo de menos R., por eso no puedo dejar de escribirte, porque aún te siento y veo tu mirada en mis ojos, en el espejo, y dicen que los ojos son el espejo del alma...
M. no sabe que aún te escribo, Cris tampoco. Nadie lo sabe, y sé que es mejor así. Yo prometo seguir enviándote mis cartas en aviones de papel.



Y prometo mejorar mi técnica para asegurarme de que te llegarán.